Clase 6 – 24 de agosto de 2024
El plus de gozar y la máquina de los discursos
Reseña por Jackie Rico
En esta clase, se aborda la pregunta V y la respuesta de Lacan en “Radiofanía”. La pregunta V dice: “¿Cuáles son las consecuencias del descubrimiento del Inconsciente. en el plano de a) de la ciencia; b) de la filosofía, c) de del marxismo, incluso del comunismo? Gabriela Rodríguez comienza planteando que la relación entre el plus de gozar y la máquina de los discursos no es perentoria, es necesaria. Con la salida del estructuralismo clásico, Lacan necesitará la estructura de discurso y la topología para dar cuenta de la inclusión del goce.
En la pregunta anterior, Georgin pregunta a Lacan si el descubrimiento del Inconsciente provocaba una subversión en la teoría del conocimiento. Lacan había respondido que en todo caso el inconsciente tenía más que ver con los fallos en la teoría del conocimiento, que con su subversión.
Podemos aislar una serie de afirmaciones que Lacan produce para responder: el inconsciente es un saber que se sustrae a la consciencia, está estructurado como un lenguaje, emerge en los fallos del conocimiento como un saber ignorado y finalmente que el inconsciente es, apuntando con ello a su dimensión de existencia, en contraste con hacer del inconsciente una noción ligada a las posibilidades de la definición. La idea de que el inconsciente es podemos articularla al inconsciente “pulsación temporal” del Seminario 11, porque allí esta implicada también la dimensión del tiempo.
Freud se había referido al inconsciente como una hipótesis necesaria que se deduce a partir de sus efectos. Lacan afirma que cuando Freud intentá decir algo sobre este inconsciente lo que hace es lingüistería.
También Gabriela se refirió al curso Los usos del lapso de Miller, donde trabaja al inconsciente en un registro diferente del ser, “no es un ser”, su abordaje queja fuera entonces la ontología y se corresponde con el registro de la ética.
El psicoanálisis no es un asunto de conocimiento; el sujeto no sale de un análisis conociéndose mejor, más bien, la experiencia analítica consiste en un vaciamiento de esas ideas preconcebidas con las que uno llega a analizarse.
En este momento Lacan piensa la estructura en términos de discurso: hay elementos, hay relaciones entre esos elementos, y una transformación que se produce, cuando cambian de lugar. S1, S2 y el sujeto dividido pertenecen al campo significante, mientras que el objeto a es heterogéneo respecto de los otros tres elementos, representa el elemento que le da entrada al goce.
La entrada del goce a la estructura significante, que en respuestas anteriores había sido considerado a partir de la metonimia, en el marco de esta respuesta será tratado en articulación con la plusvalía.
El paso de Marx
Siguiendo con el interés de la pregunta de Georgin, Lacan va a sostener que no hay conocimiento sino saberes a montones. Estos saberes consisten en una articulación que escribimos con el S2.
El paso de Marx, que puede ser considerado como una ruptura epistemológica, siguiendo a Bachelard, consiste en haber puesto en primer plano la función de un objeto, que será la clave del modo de producción capitalista.
Lacan en el Seminario De un Otro al otro, ya había señalado la existencia de una homología entre la plusvalía y el plus de gozar; un objeto que cumplen la misma función en dos contextos distintos.
Como había señalado Engels, la teoría de la plusvalía revela la existencia de esa parte de valor del producto que consiste en el producto del trabajo, por la cual quien se lo apropia no paga ningún equivalente. Por ende, Marx no se limitó a registrar un hecho económico ni a plantear el conflicto que este hecho genera en términos de justicia distributiva. La teoría marxista da la clave que permite entender la producción capitalista en la función oscura de este objeto.
Lacan se apoya en la teoría de Marx para introducir este plus, como un elemento en más, algo que se agrega como correlato de una pérdida. La entrada del significante en lo real produce una pérdida, una mortificación, y esa entrada del significante además de producir un vacío, inyecta un plus. Lo que es pérdida en un lugar, porque el trabajador es expoliado de su fuerza de trabajo, es recuperación en otro lugar: la risa del capitalista. Es la paradoja de la pérdida-recuperación.
Engels destaca que la plusvalía sólo se produce en la medida en que el capitalista encuentra en el mercado una mercancía inédita, que posee la cualidad de que, al consumirse, engendra un valor nuevo. El trabajo puede ser comprado como cualquier otro bien.
Con esta operatoria Lacan puede despejar la esencia del discurso analítico: el goce. En psicoanálisis, se trata de la mordedura del discurso que, por tener consecuencias en lo real, redunda en la aparición de este plus, que es su efecto. Lo que el discurso analítico ahora en su especificidad consigue demostrar es que debido al discurso, esta función de un plus aparece, como efecto de la renuncia al goce que el discurso impone. La existencia del discurso impone esta pérdida
También se puede leer ciertos párrafos de esta pregunta como un anticipo a las fórmulas de la sexuación del Seminario 20. Lacan traslada, por así decir, el esquema de la ecuación de valor de Marx, en la que se sustituye un objeto de intercambio por un objeto de uso, y en esa sustitución hay algo que queda oculto. Al ámbito del encuentro sexual para dar cuenta de las relaciones entre hombres y mujeres.
Dirá entonces, valiéndose de la “ecuación de valor” que, para el hombre, la mujer entra en la relación que no hay al ser tomada como un objeto. El hombre la toma como objetos a partir de identificarla con el falo, es decir, con eso de lo que él carece en tanto afectado por la castración En ese malentendido, se produce la ecuación de valor del lado del hombre. A la inversa, para ella que se dirige al falo, él es toma a título de falo siempre erecto. Por lo que estará siempre en falla respecto de lo que espera. La relación del lado de ella estará siempre marcada por la frustración, o por la envidia.
Al final del Seminario 14, Lacan trabaja esta cuestión a partir de las estructuras elementales del parentesco de Levi-Strauss en las que la mujer entra como objeto de intercambio. Pero para interesarse por lo que escapa a esta captura, “cobertura ideológica” por la que la mujer es atrapada por la estructura social en términos fálicos, pero, en lo que hace a su goce queda por fuera de esa captura.
Hacia el final de la respuesta Lacan vuelve sobre el inconsciente afirmando que es una llave, en tanto llave indica el paso de un discurso a otros, el cambio de discurso es señalado con una emergencia del inconsciente. Poco después en el Seminario 20, llamará a este giro signo de amor. La entrada en análisis es correlativa de una emergencia del inconsciente a ser leído como un signo de amor.