Seminario del Campo Freudiano - Sección La Plata de la EOL

Reseña Seminario de lectura de Jacques-Alain Miller -De la naturaleza de los semblantes- Clase 11- 2024

Clase 11 – 11 de septiembre 2024

El analista y los semblantes en la experiencia analítica.

Reseña por Jackie Rico

La enseñanza en psicoanálisis

La clase estuvo a cargo de Andrea Perazzo, con una apertura muy animada, en ocasión a la conmemoración del “día del maestro”, comparte una referencia de Lacan al “Maestro Zen”, con la que comienza su enseñanza: “El maestro interrumpe el silencio con cualquier cosa, un sarcasmo, una patada… A los alumnos les toca buscar las respuestas a sus propias preguntas” [1]. Frase pertinente al tema que nos convoca: la enseñanza en psicoanálisis. Enseñanza que parte de “lo que no se sabe” y aloja un imposible. Así, diferencia al maestro que, con su presencia viva del enseñante, posición de enseñante conmueve el conformismo de lo ya sabido, despierta al alumno y lo invita a que tenga que poner de su parte; del profesor, que imparte un saber listo para usar, para todos, que enseña a partir de lo que sabe, saber cerrado, dogmático y no cuestiona nada.

Propone un recorrido por las lecturas de algunos textos de Lacan y Miller, y testimonios de Pase, para trabajar la pregunta planteada por Lacan en 1957: “El psicoanálisis, lo que nos enseña… (lo que enseña el análisis a cada uno, uno por uno), ¿cómo enseñarlo?” [2], que retoma en 1978: “este discurso (analítico) excluye la dominación, en otras palabras, no enseña nada. No tiene nada de universal: por eso no es materia de enseñanza. ¿Cómo hacer para enseñar lo que no se enseña?” [3].

Nos recuerda la diferencia que Miller introduce en el Discurso de Clausura del Congreso AMP 2022 [4], entre el psicoanálisis (la teoría) que puede ser materia de enseñanza en la Universidad, y el discurso analítico (la práctica del psicoanálisis) imposible de enseñar en una clase, y subraya que ningún saber universitario nos ahorrará lo que un psicoanálisis enseña en la propia experiencia analítica; y agrega –la práctica del psicoanálisis no se enseña, a lo sumo se supervisa–.

La docente señala que estamos frente a una paradoja, lo imposible de enseñar ¿Cómo enseñar lo que un psicoanálisis enseña? ¿Cómo transmitir lo que resulta de una experiencia analítica singular, que tiene lugar en el uno por uno, a una enseñanza para todos? Plantea que existe una tesis que se vincula con las posibilidades de la enseñanza del psicoanálisis y su transmisión, se trata de “la transferencia de trabajo”, hilo rojo que atravesará la clase. Dicha tesis, guio a Lacan en la Fundación de su Escuela, y es el instrumento que mantiene vivo al psicoanálisis y a su enseñanza “La enseñanza del psicoanálisis no se puede transmitir de un sujeto a otro sino por las vías de una transferencia de trabajo”[5].

Nos invita a detenernos en algunos capítulos del curso El Banquete de los Analistas [6] de J.-A. Miller, donde retoma la tesis de la “transferencia de trabajo” para examinarla y debatirla. Allí plantea que la enseñanza del psicoanálisis se funda en la relación de un sujeto con otro, y no a un grupo. Se trata de que un trabajador incite a otro a trabajar, el trabajo mismo es transferido y después pase a otro, y que estos otros acepten transmitir algo en la Escuela. Para que la inducción al trabajo se produzca es necesario que quede algo por hacer, agujero en el saber (real), que posibilita dar lugar al trabajo de otros. Lacan quería en su Escuela “trabajadores decididos”.

La transferencia al final de un análisis no se reduce a cero, algo resta, incurable que no se liquida, y queda un saber hacer con y cada vez. Por ello Lacan vuelve a poner al analizado en posición de enseñante, esto es en una posición analizante, allí el lazo al Otro de la Escuela. Pasaje del trabajo de transferencia a la transferencia de trabajo. El “trabajo de transferencia” con el amor al saber, saber supuesto, se diferencia de la “transferencia de trabajo”, que versa sobre la transmisión del deseo de saber y el saber expuesto. Para que caiga el horror al saber y se libere el deseo de saber, necesitamos contar con la desuposición de saber en el Otro, deconsistir al Otro del “todo saber”, S(A/) barrado, esto hace posible producir algo nuevo, inventar.

Se interroga si para hablar de transferencia de trabajo, ¿sólo es posible con un fin de análisis, o un practicante del psicoanálisis en posición de enseñante puede generar “efectos de enseñanza”, puede transferir trabajo? Señala que ello puede verificarse, por ejemplo, en el SCF en las producciones de los participantes con sus trabajos, reseñas, conversaciones.

Nos invita a pensar la “investigación” en psicoanálisis, como parte de la enseñanza, búsqueda de lo nuevo, que se sostiene en el borde de “lo que no se sabe”, se trata cada vez de un recomienzo; y al Cartel como el lugar propicio para hacer una investigación, donde es posible producir un saber nuevo, producto propio, con la enunciación singular.

Encuentro donde no faltaron las enseñanzas del Pase, en esta oportunidad de dos AE, que transmiten, cada uno con su enunciación, la elaboración de un saber nuevo sobre lo que han extraído de la singularidad de su experiencia analítica, sobre lo que el psicoanálisis les ha enseñado. Hebe Tizio, en su testimonio “Al final, la transferencia de trabajo”, señala que la transferencia de trabajo se va produciendo en el análisis, y en su caso ubica cuatro momentos lógicos de construcción de la transferencia de trabajo que coinciden con puntos donde algo del saber y de la posición de goce se conmueve.

En el testimonio, “Hacerse agente de lo imposible, el deseo del analista, el pase y la Escuela”, Jorge Assef transmite cómo cambió la relación a su formación, al saber, a su práctica, y al psicoanálisis a partir de su experiencia analítica. Pasaje de lo imposible de soportar: malestar que le producía la clínica y por ello, un “esfuerzo” desmedido en el estudio, multiplicación de supervisiones, furor curandis; a soportar lo imposible, no hay analista modelo, no existe una definición universal de qué es un analista. Esfuerzo que velaba lo imposible, exigencia que fue deconsistiendo el analista.

Una clase viva, con intervenciones de los participantes y el entusiasmo contagioso de Andrea Perazzo, que sin duda tuvo resonancias en mí, y me causó a escribir esta reseña.


NOTAS

  1. Lacan, J., Seminario 1, “Los escritos técnicos de Freud”, Paidós, pág. 11.
  2. Lacan, J., “El psicoanálisis y su enseñanza” (1957), en Escritos 1, pág. 419.
  3. Lacan, J., “¡Lacan por Vincennes!” (1978). En Revista Lacaniana N°11, pág. 7.
  4. Miller, J.-A., Discurso de Clausura de la Gran Conversación Virtual Internacional de la AMP La Mujer no existe, 3 de abril de 2022.
  5. Lacan, J., Nota adjunta al Acto de Fundación, en Otros escritos, pág. 254.
  6. Miller, J.-A., El Banquete de los analistas, Paidós, Buenos Aires, 2011.

Agenda

Marzo

Inicio de clases: Sábado 15 de marzo a las 11 hs.
Mesa de apertura: "El caso entre real y ficción" 11 hs.
Marina Recalde, Patricio Alvarez, María Laura Errecarte y Belén Zubillaga.

Miércoles 19

– Taller de Escritura: 15.30 a 17 hs
– Introducción al método psicoanalítico: 17 a 18.30 hs
– Lo que la clínica de psicosis enseña al psicoanálisis: 18.30 a 20 hs

Sábado 22

– Casuística comisión 2: 11 a 12:30 hs

Miércoles 26

– Casuística comisión 1: 17 a 18.30 hs
– Lo que la clínica con niños enseña al psicoanálisis: 18.30 a 20 hs